Los científicos barajan diferentes hipótesis sobre el origen de la nueva variante del coronavirus que se expande por el mundo
El consenso es que no se trata de una mutación reciente y que se separó de otras como Alfa y Delta al principio de la pandemia
La gran incógnita es cómo ha permanecido oculta tanto tiempo
Desde que los científicos sudafricanos secuenciaron la nueva variante ómicron del coronavirus la comunidad científica se pregunta de dónde ha salido y cómo evolucionó.
La revista Science ha hecho un repaso de las hipótesis más plausibles sobre su origen, muy distinto al del resto de las variantes de interés durante la pandemia, como Alfa o Delta, y las pistas llevan a tres posibles sospechosos:
- Podría haberse gestado en un paciente con infección crónica por COVID-19.
- Podría haber evolucionado en una especie no humana, en animales, y recientemente se ha transmitido de nuevo a las personas.
- El virus podría haber circulado y evolucionado en una población con poca vigilancia y secuenciación.
Si algo tienen claro los investigadores es que ómicron no se ha desarrollado a partir de una de las variantes anteriores de preocupación. Ómicron parece haber evolucionado en paralelo y en la oscuridad porque es tan diferente de los millones de genomas del SARS-CoV-2 que se han secuenciado que resulta difícil identificar a sus parientes víricos más cercanos. La viróloga de la Universidad de Berna, Emma Hodcroft, le ha dicho a Science que ella apostaría porque ómicron se remonta a las primeras cepas de la pandemia, "a mediados de 2020".
¿Cómo ha permanecido oculta hasta ahora?
Pero si es tan antigua. ¿Cómo ha permanecido oculta hasta ahora? Las hipótesis son diversas. El virólogo del Hospital Universitario Charité de Berlín, Christian Drosten, se muestra partidario en el articulo de Science de qué ómicron surgió en algún lugar del sur de África durante la ola del pasado invierno. "Supongo que esto no evolucionó en Sudáfrica, donde se está llevando a cabo una gran cantidad de secuenciación".
Otros investigadores tienen dudas. Andrew Rambaut, de la Universidad de Edimburgo, le reconoce a la publicación científica que no ve cómo el virus pudo haber permanecido oculto en un grupo de personas durante tanto tiempo. “No estoy seguro de que haya realmente ningún lugar del mundo que esté lo suficientemente aislado como para que este tipo de virus se transmita durante ese período de tiempo sin que surja en varios lugares”, asegura.
Rambaut y otros son más partidarios de la hipótesis de que ómicron evolucionara en un paciente crónico con inmunidad deprimida. Richard Lessells, investigador de enfermedades infecciosas de la Universidad de KwaZulu-Natal cree que la evidencia que respalda esa posibilidad es cada vez más sólida. Se basa en investigaciones realizadas por el mismo y por sus colegas, publicadas en un 'preprint', en el que identificaron a una mujer infectado por VIH en Sudáfrica que fue portadora del SARS-CoV-2 durante más de 6 meses. En este caso, el virus acumuló en el organismo de la joven muchos de los cambios que ahora se ven en las variantes de interés señaladas por la OMS.
El virólogo del Hospital Universitario Charité de Berlín no comparte el análisis de Lessells, opina que la experiencia con virus como el de la gripe avala que los virus mutan en el interior de las personas inmunodeprimidas, pero afirma que dichos cambios suelen volverlos menos capaces de transmitirse de persona a persona.
No lo ve tan claro la bióloga evolutiva del Instituto de Estudios Avanzados de Berlín, Jessica Metcalf que en declaraciones a Science reconoce que no es seguro que esas experiencias pasadas con otros virus se puedan aplicar al SARS-CoV-2. "Creo que una de las razones por las que este virus ha funcionado tan bien es que una mejor unión a ACE2 [su receptor en las células humanas] ayuda tanto a la propagación dentro del hospedador como a la propagación entre hospedadores". Aún así, por el momento, Metcalf está de acuerdo con Drosten en que ómicron probablemente circuló y evolucionó en una población oculta.
La hipótesis del salto desde animales
Otra de las posibilidades que barajan los científicos es que ómicron haya estado escondido en roedores u otros animales. “El genoma es tan extraño”, reconoce a Science Kristian Andersen, investigadora de enfermedades infecciosas en Scripps Research, que señala su extrañeza ante la mezcla de mutaciones que presenta esta variante, muchas de las cuales no se habían visto antes.
El biólogo evolutivo Mike Worobey, de la Universidad de Arizona, Tucson, señala en el artículo de la publicación científica que “es interesante lo locamente diferente que es”, aunque él se inclina más por la explicación de que ómicron surgiera en una persona inmunosuprimida.
Una posible simbiosis con otro virus
Por si no fueran suficientes las dudas, Reuters publica este sábado que ómicron probablemente adquirió al menos una de sus mutaciones al recoger un fragmento de material genético de otro virus, posiblemente uno que causa el resfriado común y que está presente en las mismas células infectadas.
Según los investigadores consultados por agencia internacional de noticias hay una secuencia génica en la nueva variante que no aparece en ninguna versión anterior del coronavirus, pero que es omnipresente en muchos otros virus, incluidos los que causan el resfriado común, y también en el genoma humano.
El peligro de esta mutación sería que, al parecer ómicron "más humano" esto le ayudaría a evadir mejor a nuestro sistema inmunológico, advierte a 'Reuters' Venky Soundararajan, de la firma de análisis de datos con sede en Cambridge, Massachusetts, nference, y que es el responsable del 'preprint' que ha descubierto esta mutación y que ha sido publicado en el sitio web 'OSF Preprints'.
La investigación apuntaría a ómicron se contagia más fácilmente, pero también a que podría causar una enfermedad más leve. Aunque aún hay que estudiar sus efectos para confirmar estas aseveraciones.
Demasiado pronto para certezas
La conclusión del artículo de Science es que es demasiado pronto para destacar cualquiera de las teorías posibles sobre las otras. Otra de las enseñanzas que parecen desprenderse de la aparición de ómicron es la necesidad de centrar la atención en la enorme brecha entre las vacunas COVID-19 en los países más ricos y más pobres, aunque en esto también hay discrepancias. Algunos científicos opinan que haber vacunado más en África tampoco nos habría librado de ómicron. Las preguntas acerca de la nueva variante, por el momento, siguen siendo mucho más numerosas que las respuestas.
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Pirata Oscar
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