La Selección vence en la prórroga a Suecia (75-78) con 20 puntos de la balear, que se convierte en la 7ª máxima anotadora de siempre en el Eurobasket.
Impoluta. La Selección cerró la fase de grupos del Eurobasket con un brillante e invicto 3-0 que la permite viajar a Atenas, a Grecia y a los cuartos de final como primera de Hamburgo (Alemania). Su rival, la República Checa. Pero no fue tan sencillo como ante Gran Bretaña y frente a Alemania. Fue una batalla majestuosa contra Suecia (75-78), que nunca se cayó del partido, caminó siempre sobre el alambre (algo dentro de su ADN) para desfallecer finalmente en una prórroga que forzó a pesar de tener tres tiros libres para ganar y la increíble labor de su trío Lundquist (21), Fontaine (17) y Eldebrink (14).
Nystrom solo anotó dos porque las nórdicas necesitaban ganar de ocho o más puntos para dejar fuera a Alemania en caso de un triple empate más que probable: las germanas se enfrentaban a continuación contra las débiles británicas... y se llevaron el duelo por 67-80.
Fue una victoria de las que educan a un grupo tan joven, que testan sus nervios en un gran torneo, de las que ayudan a crecer y sirven en los partidos que vienen ahora, de vida y muerte. Y también para elevar aún más la leyenda de una de las más grandes del baloncesto nacional: Alba Torrens.
La balear alcanzó los 720 puntos en un Eurobasket tras los 20 anotados este domingo. Una cifra que la eleva hasta la 7ª posición de siempre en un torneo continental. Deja atrás a las magiares Zsuzsanna Boksay y Lenke Kissy y a la neerlandesa Carla Ida de Liefde.
La hora (15:15), el calor que flotaba en el Inselpark Arena, la sensación de misión cumplida tras ganar a Alemania y la diferencia de necesidades no presagiaban la misma presión. Y, en cierto modo, así fue. España no entró con buen pie en el partido. La intensidad atrás no era igual que ante las germanas y el ataque… digamos que no fluía como el Elba hamburgués. Fam luchaba sin premio y a Carrera y a Ginzo les fallaba la muñeca en el último movimiento.
Solo Torrens encontraba ritmo: 8 puntos en el primer acto con dos triples para convertirse en la 7ª anotadora de siempre en el Eurobasket con 708 tantos. Cerraba con 12 al descanso y 20 al final. Fue su 37º partido en un torneo continental con dobles figuras. Solo Amaya Valdemoro había alcanzado esa cota con la Selección. Leyenda viva del baloncesto español.
Suecia no quería saber nada de historia. Colapsaba por dentro a España y presionaba bien a sus bases para dejar a su rival con 16 puntos, su menor anotación del torneo tras el primer periodo. Lundquist y Eldebrink, con 14 tantos combinados, eran los pilares de unas nórdicas que encontraban bien a sus lanzadores exteriores, pero que estaban muy desacertadas: 7 de 25 en tiros de campo, 2 de 12 desde el triple.
Y muy poco cuidadosas, 7 pérdidas. Carrera, con 4 robos, las hacían sufrir en la primera línea de pase y España hacía 9 tantos tras llevarse la cartera rival. Al descanso, 23-31 tras una buena canasta de Ayuso que cerraba un parcial de 2-8 en 3:19.
La felicidad parecía completa cuando Ortiz ponía el +10 (23-33) nada más volver de vestuarios, pero las suecas tienen la habilidad de agarrarse como pocas a los partidos. Y se pusieron manos a la obra: parcial de 11-2 en 3:15 con tres triples, uno de Lundquist (un cuchillo, además, hacia canasta), uno de Wadling y otro de una hiperactiva Fontaine.
Méndez paraba y la Selección reiniciaba. Primero, Fam y, luego, Buenavida. Torrens entraba en acción e Iyana castigaba desde fuera. Solo malos errores de conexión impidieron superar la decena de diferencia. Araújo cerraba el tercer periodo para el 42-50.
Y más sufrimiento. Las nórdicas decidieron salir a tumba abierta con la insistente Fontaine a la cabeza. La ala-pívot empujaba en ataque y España no encontraba la tecla para atacar en estático. Eldebrink situaba el 51-55 y la Selección reaccionaba con Carrera hasta el 56-62 a falta de 90 segundos. Parecía hecho. Pero, no. A 53 segundos, empate a 62 con dos tiros libres de Eldebrink.
Una discutible falta de Torrens (si parece que da a la sueca en la mano) sobre Nystrom dio a las nórdicas la opción de ganar, pero ya saben la historia: prórroga dominada por los tiros libres. Una preciosa canasta de Ortiz y un robo de Buenavida colocaron el 3-0 para España. Ahora El Pirero. Ahora, los cruces.
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