Mejor no ha podido empezar los Juegos ParaLímpicos para los deportistas españoles el primer dia y el segundo día de competición consiguiendo las tres primeras medallas con dos platas en natación y una en ciclismo.
Para que tengais un poco idea os traigo tambien entrevistas interesante que vale la pena leerlas.
Quien son las estrellas Paralímpicos españoles, la natación paralimpicos como es, sus categorias y el calendario de las pruebas del 25 al 26 ya en los próximos dias ire poniendo los otros horarios de cada jornada.
Y unos enlaces de una Guia para seguir los Juegos Paralímpicos y los Juegos Paralímpicos el deporte explicado por los héroes.
Que tenéis un poco de todo vale la pena leerlo os va gustar lo que os traigo.
JUEGOS PARALÍMPICOS TOKIO 2020
¡Alfonso Cabello gana el primer oro para España!
El ciclista español se ha impuesto en la prueba contrarreloj del kilómetro en categoría C4-5 con nuevo récord del mundo. La plata fue para Jody Cundy y el bronce para Jozef Metelka.
A más de 130 kilómetros de Tokio, en el velódromo de Izu, España encontró su primer oro y la tercera medalla de estos Juegos. Se la colgó el ciclista Alfonso Cabello en kilómetro contrarreloj C4-5, con una marca de 1.01.557, nuevo récord mundial, algo que ya tenía en su poder. El cordobés, de 27 años, suma su cuarto metal paralímpico, después de haber conseguido un oro en Londres 2012 y dos bronces en Río 2016. Sin embargo, esto no queda ahí ya que el sábado tiene una nueva oportunidad para seguir ampliando su palmarés y competirá en velocidad por equipos junto a Ricardo Ten y Pablo Jaramillo.
El 'Rayo' de la Rambla fue el último en tomar la salida y se impuso al británico Jody Cundy (1:01.847) y al eslovaco Jozef Metelka (1:04.786) en una prueba en la que se aplicó la factorización. Es decir, se compensaba con siete décimas de segundo la diferencia de categoría y, por tanto, de grado de discapacidad entre los participantes.
Cabello, a quien le falta el antebrazo izquierdo, compite habitualmente contra ciclistas sin discapacidad y engordan su palmarés tres medallas en Campeonatos de España absolutos de pista: una plata en 2019 y dos bronces en 2018 y 2020. "Me siento en una nube, he trabajado muy duro durante muchos meses y conseguir el oro es un sueño hecho realidad. He rendido al 150%. Cuando he visto la marca que ha hecho el rival sabía que me tenía que esforzar a tope y, al final, he hecho lo que tenía que hacer. Darlo todo y demostrar que las barreras están para tumbarlas", expresó profundamente emocionado.
Y es que su historia es una historia de superación. Ya desde niño su familia le inculcó que podía conseguir lo mismo que los demás, aunque eso pudiera suponerle un plus de esfuerzo. Fue así como pasó de las lágrimas por no poderse abrochar los cordones de los zapatos en el colegio, lo que desató las mofas de sus compañeros, a hacerlo en menos tiempo que ellos. Cuestión de práctica y no desistir, dejando atrás los complejos para aferrarse a sus virtudes.
Picó de otros deportes como baloncesto, tenis, balonmano, voleibol o natación. Sin embargo, el ciclismo fue ganando terreno y carreras... La de Pozoblanco, con sólo nueve años, se convirtió en toda una declaración de intenciones. Se presentó con una bicicleta sin adaptación, sin prótesis, ni freno delantero. Aun así venció. A base de tesón. Algo que ha respirado en casa. Viene de una familia trabajadora, que sabe lo que cuesta ganarse las cosas. Su padre, sin ir más lejos, barría los cristales rotos de las noches de botellón en el velódromo de Posadas (Córdoba) para que Alfonso pudiese entrenar. Hoy se cuelga el oro y escucha el himno nacional desde Izu, con lágrimas en los ojos y su gente en el pensamiento.
Miguel Luque inaugura el medallero español en Tokio
Gana la plata en 50 metros braza SB3 y sigue en el podio durante 21 años
El nadador Miguel Luque, en los Juegos Paralímpicos.
Miguel Luque, que debutó en los Juegos de Sidney 2000, ha estrenado el medallero español en la primera jornada de los Juegos Paralímpicos con una medalla de plata en los 50 metros braza SB3. El catalán, que sube al podio en su sexta cita paralímpica, se mantiene en el él desde hace 21 años y ya acumula siete medallas: dos de oro, tres de plata y dos de bronce. Seis de ellas en los 50 braza, su prueba fetiche.
A sus 44 años -cumple 45 el mes que viene- paró el cronómetro en un tiempo de 49.08, solo por detrás del ruso Roman Zhdanov, que lo hizo en 46.49 y supone nuevo récord mundial. La medalla de bronce fue para el japonés Takayuki Suzuki. La plusmarca mundial hasta ahora estaba en manos de Efrem Morelli (15 de septiembre de 2019 con 47.49).
Es la mejor medalla de mi carrera deportiva, estoy en mi mejor momento
Miguel Luque, subcampeón de 50 braza SB3
"Es la mejor medalla de mi carrera deportiva porque después de 21 años conseguir una y, además, haciendo mi mejor tiempo significa el trabajo y el esfuerzo que he estado realizando estos últimos años. Estoy en mi mejor momento deportivo. Siempre he tenido a mi lado muy buenos entrenadores, que es la base principal para dar buenos resultados. A partir de ahí la disciplina, la constancia, la tenacidad...", dijo ante la prensa española tras proclamarse subcampeón paralímpico en Tokio. El catalán dedicó este nuevo éxito a su familia y amigos, pero en especial a su hijo.
Luque reconoció que en ningún momento miró a las calles de al lado en la piscina para saber cómo iba. "Cuando compito me centro en llegar el primero y no mirar al lado, como Forrest Gump corriendo", dijo bromeando.
El catalán, que nació con una artrogriposis múltiple congénita que le produjo una malformación y falta de movilidad en las piernas, puede seguir ampliando su palmarés el sábado 28 de agosto en los 150 metros estilos y el viernes 3 de septiembre en los 50 espalda.
"Esto es un chute de energía para afrontar estos días de competición. Voy a darlo todo, siempre soy optimista", dijo. Y reconoció que el jet lag ha hecho que no esté al cien por cien aún. "Si hubiésemos tenido un par de días más, hubiera estado mejor físicamente", reconoció.
Esto es un chute de energía para afrontar estos días de competición
Miguel Luque, subcamepón paralímpico en 50 braza
El catalán ha atravesado una época complicada porque en 2019 le cambiaron de categoría con nadadores con menos discapacidad y pasó por un periodo complicado en el que no pudo clasificarse para el Europeo ni el Mundial, pero él siguió trabajando y entrenando en silencio. Este año ha regresado a su categoría y ha vuelto a reinar.
Thomas Bach, presidente del COI, fue el encargado de hacerle entrega de la medalla en el podio, medalla que como ya es habitual en los Juegos, se cuelgan los propios deportistas para evitar el contacto por la covid-19.
La natación como terapia
Empezó a nadar con cinco años como herramienta terapéutica para contener la degeneración derivada de su enfermedad, evitar dolores y mejorar su calidad de vida. A los 12 años descubrió el baloncesto en silla de ruedas y lo compaginó durante 10 años con la piscina.
Debutó a nivel internacional en Sheffield (Gran Bretaña) en 1999 y desde entonces se mantiene en el podio. Un año después, debutó en Sidney y ahí empezó la leyenda: oro en 50 braza. Desde que vio los Juegos de Barcelona'92 tuvo claro que él quería estar en unos. Y ya van seis y los seis con medalla.
Garrido, Marqués y Levecq, diplomas
La primera jornada de las finales en la piscina empezó con la prueba masculina de los 400 metros libre S9, en la que Jacobo Garrido acabó quinto con un tiempo de 4:17.41. El español se mantuvo en esa plaza desde los primros 50 metros en una prueba dominada por Australia, con William Martin oro (4:10.25) y Alexander Tuckfield bronce (4:13.54). La plata fue para el francés Ugo Didier (4:11.33).
En la misma distancia, Nuria Marqués, que defendía el título paralímpico en 400 libre S9 de Río 2016, acabó sexta (4:52.64). La catalana ha cambiado su forma de nadar en este ciclo y ahora es más fuerte en pruebas como los 200 estilos. La final estuvo dominada de principio a fin por la australiana Lakeisha Patterson, que se llevó el oro con un tiempo de 4:36.68. En los últimos 100 metros, un cambio de ritmo de la húngara Zsofia Konkoly estuvo a punto de dejar sin oro a la 'aussie'. Kolonky se llevó la plata (4:36.76) y el bronce fue para Toni Shaw (4:39.32).
En 50 libre S10, David Levecq acabó octavo (25.08). Iñigo Llopis, Jose Antonio Marí, Isabel Yinghua y Ariadna Edo no entraron en las finales.
Toni Ponce conquista la segunda plata para España y completa su colección
El catalán, que tenía medallas europeas y mundiales, gana su primer metal en Juegos
Toni Ponce, durante una competición.
Toni Ponce es un seguro de podio. No se ha bajado de él en ninguna competición internacional desde 2017. Además, ha ido devorando records mundiales en el último ciclo con una facilidad pasmosa, pero le faltaba la medalla paralímpica a su colección. Desde hoy ya la tiene. El catalán, que llegó a la final con el mejor tiempo de los ocho competidores, se ha colgado la plata en 200 metros libre S5 con un tiempo de 2:35.20. Es la segunda medalla para la delegación española en Tokio, tras la plata de Miguel Luque. Luis Huerta rozó el podio -acabó cuarto- en su debut en unos Juegos con sólo 20 años y el veterano 'Chano' Rodríguez, con 64, acabó octavo.
"Esta medalla va dedicada a mi madre", dijo el catalán. María Rosa falleció de cáncer hace 13 años y su última charla con ella se le quedó grabada a fuego. Toni había dejado el deporte y llevaba una vida sedentaria, pero al ver a gente con una discapacidad similar a la suya compitiendo al máximo nivel en la piscina de los Juegos Paralímpicos de Londres por televisión, decidió cambiar el chip por ella. "Quería hacer cosas grandes", reconocía hace tiempo a MARCA. La plata de hoy también va dedicada a su mujer.
Los primeros 50 metros de la final en el Centro Acuático de Tokio fueron un mano a mano entre Ponce y el italiano Francesco Bocciardo, que a partir de los 100 pisó el acelerador y fue abriendo brecha con el español. El transalpino, oro con un tiempo de 2:26.76 y récord paralímpico, se mostró intratable los últimos 100 metros. También el español, plusmarquista mundial de 50, 100 y 200 braza, que defendió su segunda plaza con uñas y dientes. Completó el podio la leyenda brasileña Daniel Dias con un tiempo de 2:38.61. Este bronce supone su medalla número 25 en Juegos.
"Siento mucho orgullo de poder conseguir una plata para España. Estoy muy contento, estos últimos cinco años han sido muy difíciles pero gracias a mi gente y a los patrocinadores del CPE porque me han ayudado a seguir. Sabíamos que en esta prueba el italiano es de otro mundo, pero había dudas con el gran Daniel Dias. Había que nadar como habíamos entrenado y ha salido", dijo con satisfacción ante la prensa española en la zona mixta del Centro Acuático de Tokio.
Siento mucho orgullo de poder conseguir una plata para España
Toni Ponce, subcampeón paralímpico de 200 libre
El catalán, que ha llegado a Tokio con la vitola de ser uno de los favoritos del equipo español, ha dado muestras de saber gestionar bien la presión. "Lo complicado es llegar aquí como uno de los favoritos, sobre todo en braza, pero tenemos los pies en el suelo y unos Juegos son unos Juegos. Día a día pero hay que ponerse la presión justa y necesaria. Sabía que podía ganar la medalla. A mí me gusta soñar. Primero soñarlo y luego luchar e intentar hacerlo. Sabía que podía pasar por el ranking", rconoció.
En sus primeros Juegos hace cinco años, los de Río 2016, consiguió diplomas en 400 libre S7 y en 100 braza SB6. Esta vez, quería más. Durante este largo ciclo de cinco años, Ponce -fisioterapeuta de profesión- ha dado prioridad a la piscina. Se entrena en el CAR de San Cugat de Barcelona bajo las órdenes de Jaume Marcé y junto a él y a los biomecánicos ha ido arañando centésimas al crono estos años. Ni la pandemia ha conseguido pararle. Después de ocho meses sin competir, regresaró de las Series Mundiales de Berlín, una de las pruebas más prestigiosas, con nueve medallas en la maleta.
Un éxito cocinado a fuego lento
Ponce, ahora con 34 años, se metió con seis años por primera vez en una piscina, pero la natación no le motivaba y acabó dejándola. Los médicos se la habían recomendado para mejorar la fuerza y la movilidad de sus piernas, ya que desde niño sufre una paraparesia espástica bilateral degenerativa, una mutación de un gene que le provoca una gran limitación al andar y hace que no tenga mucha fuerza ni movilidad.
En 2013, un año después de inspirarse viendo los Juegos de Londres, empezó a entrenarse en Sitges. Tenía talento y era competitivo, por eso cada vez se iba poniendo el listón más alto. Desde mediados de 2014, comenzó a entrenarse en el CAR de Sant Cugat (Barcelona). Ese mismo año participó en su primer Europeo en Eindhoven (Holanda), donde logró el bronce en el 4x100 estilos. Era su primera medalla internacional. Un año después, en 2015, participó en su primer Mundial en Glasgow, aunque no subió al podio. Al año siguiente participó en sus primeros Juegos en Río. Tras ellos, Ponce no ha hecho más que crecer y crecer. Parece que no tiene límites.
Por su parte, Luis Huerta, que perdió el bronce en los últimos 50 metros en su debut en sus primeros Juegos, se mostró satisfecho con el diploma.: "Me sabe a mucho este cuarto puesto. Te quedas a las puertas de la medalla pero me ha costado bastante llegar hasta aquí", dijo.
Juegos Paralímpicos Tokio 2020
Álvaro Valera y Jordi Morales debutan con triunfos en Tokio
Jordi Morales, en su debut en Tokio.
En el Gimnasio Metropolitano de Tokio los resultados de los deportistas españoles fueron desiguales en los primeros partidos de la fase de grupos en la jornada inaugural.
El sevillano Álvaro Valera, que cumple diez años consecutivos como líder del ránking internacional de tenis de mesa paralímpico en la clase 6 de discapacitados físicos, inició su andadura en la competición con una sufrida victoria (2-3) ante el griego Kanellis Marios.
Más cómodo fue el triunfo de Jordi Morales, que ganó 3-0 al colombiano José Vargas en la clase 7 de discapacitados físicos, mientras que Miguel Toledo Bachiller, en silla de ruedas, cayó con el francés Stephane Molliens (2-3) en su debut en unos Juegos Paralímpicos.
El resto de rivales de España en el grupo B, Turquía, Canadá, Colombia y Japón, no compitieron en esta primera jornada.
En la categoría femenina España debutará ante Estados Unidos este martes tras 29 años de ausencia en unos Juegos. Sí lo hicieron, en su grupo, China y Países Bajos, que se impusieron a Argelia y Estados Unidos, respectivamente. En el Grupo A Canadá venció a Gran Bretaña y Japón a Australia.
La selección española masculina, dirigida por Oscar Trigo, sumó la primera victoria del campeonato en la fase de grupos al imponerse a Corea del Sur (65-53).
Asier García, que firmó un triple doble (18 puntos, 13 rebotes y 12 asistencias) y que estuvo bien escoltado por Jordi Ruiz y Álex Zarzuela (16 puntos cada uno), lideró la victoria española en Tokio.
España dominó el primer cuarto que acabó con una 16-10 a su favor en el luminoso. En el segundo cuarto llegó la reacción a través de Dong Hyeon Gim, pero los de Óscar Trigo supieron administrar su ventaja (31-24). Tras el descanso, un parcial de 0-4 al final dejaba muy abierto el partido (43-40). La buena defensa española acabó con la reacción coreana y el partido se lo llevó España por 65-53.
Las estrellas paralímpicas españolas que brillarán en Tokio
El Equipo Paralímpico Español que compite en los Juegos de Tokio está formado por 142 deportistas, 127 de ellos con discapacidad más 15 deportistas de apoyo (guías deatletismo y triatlón, pilotos de tándem, porteros de fútbol, etc). Llevan cinco años dejándose la piel para llegar a esta cita con opciones de subir al podio. Pasamos lista a algunos de los protagonistas del equipo español.
TERESA PERALES
La española más laureada en Juegos -olímpicos o paralímpicos- con 26 medallas llega a la cita de Tokio mermada físicamente por una lesión en el hombro izquierdo. Hasta hace un mes tenía el brazo en cabestrillo, pero una fuerza de voluntad de hierro ha conseguido que esté en la cita japonesa en tiempos competitivos y aspirando a entrar en finales en las cuatro pruebas que va a disputar: los 100 libre y el 50 espalda individual y los relevos 4x100 estilos femenino y 4x50 libre mixto. "Y no se puede descartar nada", avisa la nadadora, que podría acabar en el podio. Lleva abonado a él desde que debutó en los Juegos de Sidney en 2000. Los de Tokio son los sextos de su trayectoria. En octubre recogerá en Oviedo el Premio Princesa de Asturias de los Deportes.
TONI PONCE
El nadador catalán es un seguro de medalla. En el último ciclo paralímpico no se ha bajado del podio desde 2017 y ha ido devorando récords mundiales con una facilidad impresionante. Este mismo año, el de 50 metros braza (S5) con un tiempo de 39.81. Es el recordman mundial también en 100 metros braza (1:25.62) y 200 (2:48.02).
En sus primeros Juegos Paralímpicos, los de Río 2016, consiguió diplomas en 400 libre S7 y en 100 braza SB6. Desde entonces, este deportista con discapacidad física ha conseguido tres medallas en el Mundial de México 2017 y otras tantas en el Europeo de Dublín 2018 y en el Mundial de Londres 2019. En el torneo continental de 2021 ha subido al podio en siete ocasiones. Ha llegado a Tokio a por la medalla.
SUSANA RODRÍGUEZ
La gallega, con deficiencia visual debido al albinismo, va a hacer historia en Tokio al convertirse en la primera deportista española en competir en dos deportes (triatlón y atletismo) en una misma cita paralímpica. Rodríguez, fisioerapeuta y médico de profesión, estuvo en primera línea de la lucha contra la covid-19 en el Clínico de Santiago de Compostela, donde ha trabajado hasta que se ha pedido una excedencia para preparar los Juegos. En Japón competirá con Sarah Loher en triatlón, su guía desde hace menos de un año, y con Celso Comesaña en 1.500 metros. Es una de las favoritas al podio en triatlón, donde es tricampeona mundial y bicampeona de Europa. En Río, donde se estrenó este deporte, acabó quinta. Ha protagonizado recientemente la portada de la revista Time.
El atleta catalán defiende el titulo de 400 metros, pero esta vez lo hace con Guillermo Rojo como guía y no Marcos Blanquiño. Descarrega es la gran referencia internacional de esta distancia, donde se ha proclamado también campeón de Europa y del mundo. Tiene la triple corona. Debutó en los Juegos de Londres 2012, donde acabó cuarto y compitió sin guía. Después se instaló en el CAR de Madrid, donde ha entrenado y vivido hasta la pandemia, que le hizo replantearse su vida. Tras el parón, se quedó a vivir en Sevilla junto a su pareja y su hija Martina. Rojo, que es preparador físico de astronautas, se trasladó allí para seguir entrenando juntos.
ADIARATOU IGLESIAS
La velocista gallega nacida en Mali debuta en sus primeros Juegos con el cartel de una de las favoritas al podio. Se lo ganó tras lograr dos medallas de plata en su primer Mundial (Dubai, 2019) y volver a subir al podio en el Europeo de este año. La atleta, que huyó de Mali por ser albina, tiene un nivel tan alto que ha subido en varias ocasiones al podio en competiciones con atletas sin discapacidad. La última de ellas, en los Campeonatos de España sub23 donde logró dos bronce.
ALFONSO CABELLO
El ciclista cordobés, de 27 años, disputará en Tokio sus terceros Juegos Paralímpicos. El pistard español es la referencia mundial de la prueba del kilómetro en la lase C5 (para los deportistas con menor discapacidad que compiten en bicicleta convencional). Cabello, que nació sin antebrazo izquierdo, fue el deportista revelación del equipo español en Londres 2012, donde se proclamó campeón paralímpico. En Río 2016, consiguió un bronce en su especialidad -en la que también acumula seis maillots arcoíris-, además de otro tercer puesto en velocidad por equipos. Sus tiempos le han valido para competir en varios Campeonatos de España con pistards sin discapacidad y ganar una plata en 2019 y dos bronces en 2018 y 2020.
RICARDO TEN
En sólo cuatro años se ha convertido en un icono del ciclismo internacional. Tras dos décadas en la élite de la natación, donde logró más de 100 títulos nacionales, 13 campeonatos de Europa, siete del mundo y seis medallas paralímpicas (tres de ellas de oro), Ten encontró una nueva motivación en la bicicleta. Desde su debut sobre dos ruedas en el Mundial de carretera de Sudáfrica, se ha colgado 14 medallas: siete oros, tres platas y cuatro bronces. En Tokio, donde es abanderado del equipo español, competirá tanto en pista como en carretera -en 2019 se proclamó campeón mundial en ambas disciplinas-, aunque la prueba en la que más opciones tiene es en la de 3 Km persecución individual.
ÁLVARO VALERA
El palista sevillano lleva una década como número 1 de tenis de mesa de la clase C6. Desde que debutó en el Europeo de tenis de mesa de 1997, Álvaro Valera ha conquistado 5 medallas paralímpicas, 8 mundiales y 18 europeas. En total, lleva 24 años en la élite. Su enfermedad degenerativa le ha ido restando facultades físicas que ha ido supliendo con experiencia, técnica y talento. Su sueño es revalidar el oro paralímpico de Sidney en Tokio 21 años después.
LA SELECCIÓN DE BALONCESTO
El combinado masculino llega a Tokio como vigente subcampeón paralímpico. Hizo historia al subir al podio en Río hace cinco años en una final para el recuerdo ante la todopoderosa Estados Unidos. La selección de Óscar Trigo consiguió el billete a Tokio gracias a su segunda posición en el Europeo de Walbrzych (Polonia) en 2019. España ha disputado 22 de los 23 campeonatos continentales disputados hasta ahora y ha subido al podio en cuatro ocasiones (platas en Walbrzych 2019 y París 1995 y bronces en Frákfurt 2013 y Nazaret 2011). Es la décima presencia de la selección masculina en unos Juegos.
Y será la segunda de la selección femenina, que tras estar en Barcelona'92 como país anfitrión vuelve 29 años después a unos Juegos, esta vez habiendo conseguido la clasificación. Sueñan con su primera medalla paralímpica.
LA SELECCIÓN DE FÚTBOL 5 CIEGOS
El combinado que dirige Jesús Bargueiras consiguió el billete a Tokio al proclamarse campeón de Europa de Roma 2019. Era su octavo título continental, tras los de Barcelona 1997, Oporto 1999, París 2001, Manchester 2003, Torremolinos 2005, Atenas 2007 y Loano (Italia) 2013. Además, en Aksaray (Turquía) 2011 y Berlín 2017 fue segunda y en Hereford (Gran Bretaña) 2015 acabó tercera. España, que también ha subido al podio en cuatro de los seis Mundiales disputados hasta ahora, tiene dos medallas paralímpicas: bronce en Atenas 2004 y Londres 2012. En Pekín 2008 fue cuarta y en Río 2016, sexta.
La 'niña milagro' que sobrevivió a la bomba con la que se suicidaron sus padres
Haven Shepherd, que perdió las dos piernas por debajo de las rodillas con 14 meses, es nadadora del equipo de Estados Unidos en los Juegos Paralímpicos de Tokio
Haven Shepherd posa en la piscina olímpia de Tokio.
Haven Shepherd sólo tenía 14 meses cuando sus padres, que mantenían una relación extramatrimonial, se ataron una bomba al cuerpo y sostuvieron a su hija en brazos en un intento de suicidio familiar en Vietnam. Creyeron que si no podían estar juntos, debían morir todos. Ambos perdieron la vida por la explosión, pero la pequeña sobrevivió milagosamente, aunque tuvieron que amputarle las dos piernas por debajo de la rodilla como consecuencia de las graves heridas.
Pese a todo, no les guarda rencor por lo sucedido. "Es una vida que nunca viví; no la recuerdo", decía hace unos días a la revista People. "Sólo perdí las piernas, podría haber perdido la vida", reconoce ahora en Tokio ante los medios de la organización. Shepherd, de 18 años, debutará en sus primeros Juegos Paralímpicos compitiendo en los 100m espalda SB7 y en 200 estilos SB8 representando a Estados Unidos.
Sólo perdí las piernas, podría haber perdido la vida
Haven Shepherd, nadadora paralímpica de EE.UU.
Una nueva vida en Estados Unidos
A los seis meses de perder a sus padres biológicos, fue adoptada por Shelly y Rob Shepherd, un matrimonio que le dio una familia y una segunda oportunidad en Carthage (Missouri). "Les estoy muy agradecida por haberme salvado. Mis padres me dieron el mundo", reconoce.
Haven Shepherd sólo tenía 14 meses cuando sus padres, que mantenían una relación extramatrimonial, se ataron una bomba al cuerpo y sostuvieron a su hija en brazos en un intento de suicidio familiar en Vietnam. Creyeron que si no podían estar juntos, debían morir todos. Ambos perdieron la vida por la explosión, pero la pequeña sobrevivió milagosamente, aunque tuvieron que amputarle las dos piernas por debajo de la rodilla como consecuencia de las graves heridas.
Pese a todo, no les guarda rencor por lo sucedido. "Es una vida que nunca viví; no la recuerdo", decía hace unos días a la revista People. "Sólo perdí las piernas, podría haber perdido la vida", reconoce ahora en Tokio ante los medios de la organización. Shepherd, de 18 años, debutará en sus primeros Juegos Paralímpicos compitiendo en los 100m espalda SB7 y en 200 estilos SB8 representando a Estados Unidos.
Sólo perdí las piernas, podría haber perdido la vida
Haven Shepherd, nadadora paralímpica de EE.UU.
Una nueva vida en Estados Unidos
A los seis meses de perder a sus padres biológicos, fue adoptada por Shelly y Rob Shepherd, un matrimonio que le dio una familia y una segunda oportunidad en Carthage (Missouri). "Les estoy muy agradecida por haberme salvado. Mis padres me dieron el mundo", reconoce.
Allí se ha criado junto con cuatro hermanas mayores y dos hermanos. "Siempre he bromeado con mis hermanos diciendo que soy la niña milagro, soy la favorita de mamá y papá", dice entre risas.
Su buen humor y optimismo son sus señas de identidad. "Siempre hay que mirar lo positivo de la vida: sé que tuve una circunstancia muy mala, pero salí y tuve esa segunda oportunidad. He aceptado ser única y eso ha marcado la diferencia en mi vida. Acepta las cosas que no puedes cambiar y cambia las cosas que puedes", dice a modo de filosofía de vida.
He aceptado ser única y eso ha marcado la diferencia en mi vida
Haven Shepherd, nadadora paralímpica
Colabora con fundaciones que tratan de educar a los niños en el respeto y da a conocer el deporte adaptado. "Sólo quiero mostrar a la gente que las personas con discapacidad somos como los demás. Los deportistas paralímpicos son atletas de alto nivel que casualmente tienen algún tipo de discapacidad física", dice con convicción.
Modelo y compite en CrossFit también
En la piscina, Shepherd se siente libre en la "nada" del agua, dice. "Recupero mi zen", reconoce. Entrena ocho sesiones de piscina a la semana e incluye el CrossFit en sus entrenamientos. También compite en él. Su ídolo es la también nadadora estadounidense paralímpica Jessica Long, 13 veces campeona paralímpica de natación y, como ella, doble amputada.
"Mis objetivos aquí (en Tokio) son ser yo misma y divertirme", dice. "No voy a venir con grandes expectativas sobre mí misma, porque si te pones expectativas tan altas siempre te vas a decepcionar", reflexiona.
El cuerpo perfecto no existe
Haven Shepherd, nadadora estadounidense
Sheperd, que también es modelo y su hobby es la pintura, quiere inspirar a otros en un mundo en el que hay tanto culto al cuerpo y a la imagen en tiempos de redes sociales. La nadadora ha trabajado para firmas de moda como Tommy Hilfiger. "Ahí me di cuenta de que el cuerpo perfecto no existe; sólo un puñado de personas tienen este tipo de cuerpo y este estilo de vida", explica. "Si miras a tu alrededor, todos tenemos pequeños golpes y moratones y todos somos imperfectos", reflexiona.
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