Esta semana en GASTRONOMÍA vamos con recetas, Los alimentos que no se deben guardar en la puerta de la nevera, la de esta semana nos va venir bien para estar seguro los alimentos que no tenemos que tener en la nevera de la puerta y asi podamos comerlos en perfectas condiciones.
Las baldas de la puerta del frigorífico son las zonas más sensibles y menos frías
Hay que evitar almacenar los alimentos precederos en lugares con cambios bruscos de temperatura
La nevera, a pesar de ser uno de los electrodomésticos que más energía consume debido a su funcionamiento diario, es esencial para poder mantener los alimentos en buenas condiciones.
Por ello, es de vital importancia escoger un frigorífico en buenas condiciones, conocer cómo regular y ajustar la temperatura para conseguir que su funcionamiento sea eficiente y también realizar una buena rutina de mantenimiento.
Aunque el frío ralentiza los procesos biológicos naturales de los alimentos que conducen a su degradación y ayudan a que duren más tiempo, hay que tener en cuenta que no todos los productos pueden estar almacenados en la nevera y que, en este caso, el orden de los factores también altera el producto, literalmente hablando.
Qué productos no pueden estar en la puerta
Aunque en muchas ocasiones la puerta de la nevera es el lugar más práctico y rápido para almacenar los alimentos, no es el idóneo para todos. En especial para los perecederos, es decir, aquellos que tienen un tiempo de duración limitado y que se suelen estropear con más facilidad.
La puerta es la zona más sensible a cambios de temperaturas y a su vez la menos fría. Por ello, para garantizar una adecuada conservación, hay que evitar dejar ciertos alimentos, sobre todo, aquellos con mayor tendencia al crecimiento de microorganismos. A continuación, te listamos algunos de ellos.
Productos frescos
Este tipo de ingredientes necesitan guardarse en lugares fríos. Por ello, desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) recomiendan almacenar tanto la carne como el pescado en las baldas inferiores del frigorífico, que corresponde al punto más frío. De hecho, los electrodomésticos más nuevos tienen cajones específicos y marcados para su correcto almacenaje. Lo mismo ocurre con las frutas y las verduras, aquellas que sí deben ir en la nevera, deben guardarse en los cajones o baldas inferiores, los más cercanos al congelador.
Lácteos
Este tipo de productos requieren temperaturas bajas y que no haya oscilaciones que puedan comprometer su seguridad alimentaria. De esta manera, la puerta no es el lugar idóneo para almacenar los lácteos, sobre todo, quesos frescos o la leche una vez abierta.
Chocolate
Con la intención de que no se ablande o se deshaga, es muy habitual guardar una tableta de chocolate abierta en la puerta de la nevera. Un lugar accesible y por su limitado espacio, perfecto para este producto. Sin embargo, es un error. Según la OCU, lo ideal es conservarlo en un lugar fresco y seco para no alterar el producto. Cuando se guarda el cacao en la nevera es habitual que adquiera un color blanco en la superficie.
Huevos
A pesar de que algunos fabricantes de neveras incorporan un complemento para almacenarlos en la puerta, según los expertos, no se debe someter a un alimento tan delicado a cambios bruscos de temperatura. De hecho, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESA) recomienda colocar los huevos en el estante del centro.
No obstante, sí se recomienda almacenar:
- Bebidas como refrescos
- Salsas como kétchup, mostaza o la mayonesa, siempre y cuando sea industrial
- Mermeladas
Nos vemos pronto dentro de 7 días con otra nueva entrada de GASTRONOMÍA.
TODA LA INFORMACION LO HE ENCONTRADO EN LA PÁGINA OFICIAL DE Nius
Pirata Oscar
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