Las torrijas son un dulce tradicional en España, en el tiempo de Cuaresma y Semana Santa
Te invitamos a preparar la versión más ‘light’ para disfrutar de todo lo sabroso de este postre con menos calorías
Nos encanta la temporada de la cuaresma, donde comienza el buen tiempo, se acercan los días libres de la Semana Santa y el aroma de las torrijas nos abre el antojo de dulce.
A pesar de que la receta tradicional de las torrijas está muy rica, no se puede negar que es una bomba calórica. Además, es normal que a pocos meses de la llegada del verano, muchos quieran cuidar la línea y evitar comer tantos caprichos.
No obstante, en NIUS hemos querido hacer una propuesta variada para las personas que quieran reducir el consumo de azúcares, lácteos y harinas refinadas, tengan la opción de hacerlo. Con esta receta de torrijas al horno que te presentamos a continuación, puedes darte el gusto de comer torrijas igual de sabrosas que las tradicionales, aunque un poco más saludables. ¿Te animas a probarlas?
Ingredientes
- Una barra de pan integral (puedes probar de harina de espelta o de avena)
- 700 mililitros de leche desnatada o soja
- Dos palos de canela
- Piel de naranja y limón
- Una cucharada de edulcorante en polvo
- Dos o tres huevos
- Canela en polvo
- Miel
Paso a paso
- Pon la leche de tu preferencia a calentar en un cazo y añade piel de naranja, de limón, una cucharada de edulcorante y la rama de canela.
- Cuando comience a hervir, retira del fuego y cuela la leche.
- Corta la barra de pan en trozos de más o menos el mismo tamaño y colócalos en una bandeja.
- Vierte la leche aromatiza caliente encima del pan hasta que se empape bien.
- Mientras tanto, precalienta el horno a 165 °C.
- Pasa cada torrija por los huevos bien batidos y colócalas con cuidado de no romperlas en una bandeja de horno forrada con papel de hornear para que no se peguen.
- Las torrijas se preparan muy rápidamente, necesitarán unos seis minutos para empezar a estar doradas. Luego dales la vuelta y déjalas otros tres minutos.
- Una vez hayan alcanzado el punto de cocción deseado, sácalas del horno.
- Esparce canela en polvo y un poco de miel para darles un toque más dulce.
Información nutricional
Por cada 100 gramos de torrijas al horno:
- 95 calorías
- 4 gramos de proteínas
- 5 gramos de grasas
- 8 gramos de carbohidratos
Cuál es el mejor pan para hacer torrijas
Las torrijas son uno de los manjares más deliciosos de la Semana Santa
El secreto para hacer las mejores torrijas se encuentra en el tipo de pan con el que las elabores
La Semana Santa representa las primeras vacaciones largas tras las Navidades, el inicio del buen tiempo primaveral, una oportunidad perfecta para viajar de nuevo y como no, un período para disfrutar de nuestra gastronomía tradicional.
En esta época tenemos la excusa perfecta para ponernos finos a base de pestiños, leche frita, buñuelos de bacalao y, sobre todo, de torrijas. Las torrijas son uno de los postres más antiguos que se conocen y uno de los más queridos por los amantes del dulce.
Asimismo, son extremadamente sencillas de preparar y muy energéticas: tan solo necesitas pan, leche, huevos, canela y azúcar. De todos estos ingredientes, el más importante para elaborar unas torrijas dignas de una estrella Michelín es el pan. Tradicionalmente, se utilizaba pan duro para aprovecharlo, aunque hoy en día tenemos otras opciones que pueden ofrecernos mejores resultados.
Estos son los mejores tipos de pan con los que elaborar tus torrijas, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).
1. Pan especial para torrijas
Durante las fechas próximas a la Semana Santa, las panaderías y los supermercados ponen a la venta unas barras de pan especiales para hacer torrijas. Este tipo de pan es, sin duda, el que ofrece unos mejores resultados.
La composición de esta barra tiene una miga consistente y una corteza blanda, lo que hace que consiga captar la humedad de la leche sin desgranarse. Asimismo, la barra incorpora unas marcas pensadas para hacer las rebanadas del tamaño correcto.
Su precio suele rondar entre 2 y 2,20 euros el kilo.
2. Pan candeal
Dadas las particularidades del pan candeal o sobado, también es una buena alternativa para preparar unas torrijas de rechupete. Se trata de una barra de miga suave, compacta y con poca humedad.
No obstante, en este caso es recomendable elaborar las torrijas con el pan candeal del día anterior, para que tenga tiempo a endurecerse un poco. Asimismo, hay que tener en cuenta que su corteza es más firme, por lo que quizás es aconsejable dejarlo en la leche durante más tiempo.
Su precio ronda los 3 euros el kilo.
3. Pan de barra
Por último, también conseguirás unos muy buenos resultados con el pan de barra común, siempre y cuando sea del día anterior. Un punto a favor de este tipo de pan es que es el más económico de los tres, con diferencia; solo cuesta alrededor de 1,8 euros el kilo.
Si finalmente optas por el pan de barra, tendrás que dejarlo bastante tiempo en la mezcla de leche y deberás cortar rebanadas grandes para que no se rompa.
Por contra, los panes que no están recomendados para hacer torrijas son el pan de chapata y el pan de molde.
Qué significado tienen los huevos de Pascua
El huevo es un símbolo de la Pascua que representa el inicio de la vida y la fertilidad
Para los cristianos, simboliza la Resurrección de Jesucristo y la esperanza de una nueva vida
Los huevos de Pascua son una de las tradiciones más emblemáticas de la temporada de Semana Santa. Durante estas fechas, es muy común ver, regalar y recibir huevos y conejos de chocolate, pero ¿dónde y por qué nació esta curiosa tradición? Quédate con nosotros que te lo contamos a continuación.
La tradición de los huevos de Pascua nace en el cristianismo, puesto que durante la cuaresma, la comunidad no debía comer carnes, huevos ni lácteos. Sin embargo, las gallinas seguían poniendo huevos y el hecho de tirarlos sería un pecado. Por ello, cubrían los huevos con cera líquida para preservarlos frescos.
Posteriormente, al terminar la Semana Santa, los cristianos se reunían a celebrar la resurrección de Jesucristo, donde regalaban los huevos guardados con diferentes decoraciones y motivos. Con el paso del tiempo, esta tradición se extendió por todo el mundo, a excepción de que ahora, no se suelen intercambiar huevos reales, sino huevos de chocolate.
El huevo, símbolo de vida, fecundidad y renovación
El huevo es un símbolo de la Pascua que coincide con el inicio de la primavera, lo cual no es casualidad. La primavera es el despertar de la vida y se inicia un nuevo ciclo vegetal. Por lo que, si se traslada esto a la creencia espiritual de los cristianos, el huevo de Pascua simboliza la Resurrección de Jesucristo y la esperanza de una nueva vida.
Huevos como regalo de Pascua
¿Cuándo y dónde surgió el hábito de intercambiar huevos por Pascua? Desde la Edad Media, los huevos comenzaron a decorarse con motivo de la Pascua y a intercambiarlos.
Al popularizarse tanto esta tradición, se comenzaron a fabricar huevos artificiales para ofrecerlos como regalos. Al principio, eran pintados a mano con colores llamativos y luego pasaron a ser decorados con el uso de metales preciosos como el oro.
Los zares de Rusia, expresaron su pasión por los huevos de oro con decorados espectaculares, siendo las obras más representativas de la cultura cristiana ortodoxa. También el rey de Inglaterra, Eduardo I, encargó, entre los siglos XIII y XIV, cientos de huevos de oro para ofrecerlos como regalos en ocasión de la fiesta de Pascua.
Huevos de chocolate
Los decorados exclusivos de la realeza, han sido reemplazados por los humildes huevos de chocolate. La realización se puede llevar a cabo en casa con moldes especiales, pero se han convertido en un producto comercializado a nivel mundial. Además, es habitual encontrar una sorpresa dentro como un juguete y destinarse a los más pequeños.
Otras costumbres de los huevos de chocolate es que, durante la celebración de la Pascua en familia o en iglesias, se esconden muchos huevos para que los niños y jóvenes jueguen a recolectarlos.
Tradición en España
Cataluña, Murcia y Valencia, son las regiones de España con más tradición en la elaboración de figuras de chocolate para celebrar la Pascua. Estas figuras son nominadas Monas de Pascua, y han adquirido gran importancia a partir de mediados del siglo pasado. Las famosas Monas de Pascua, no son solamente en forma de huevo, sino que se crean diversas esculturas con chocolate que son verdaderas obras de arte.
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