Según un estudio publicado en 'bioRxiv', ambas poseen una mayor capacidad de transmisibilidad y presentan mutaciones adicionales a la variante original.
La Organización Mundial de la Salud avisó un mes atrás sobre la aparición de dos nuevos sublinajes de la variante Ómicron. Hace dos semanas, Sudáfrica notificó un incremento de la cifra diaria de contagios por COVID-19, mientras que otros países como Estados Unidos, han comprobado como los datos por coronavirus vuelven a repuntar en todo el país.
Se trata de las variantes BA.4 y BA.5. Ambas fueron identificadas en Sudáfrica a principios de 2022. La primera de ellas, el 10 de enero, mientras que la segunda fue identificada en el país sudafricano el 26 de febrero, según los datos ofrecidos por 'Outbreak.info'. A día de hoy, representan en torno al 5% y al 6% de los casos secuenciados en Sudáfrica, y supone una evolución con respecto a la variante original (BA.1), identificada el pasado mes de noviembre.
Sin embargo, Sudáfrica no ha sido el único país donde se ha identificado hasta ahora. Dinamarca, Botswana, Escocia e Inglaterra también han registrado contagios causados por la variante BA.4, mientras que se han detectado secuencias de BA.5 en otros países como China, Francia y Portugal. En España, concretamente en Asturias, se han detectado los 12 primeros casos por parte del laboratorio de Microbiología del Hospital Central Universitario de Asturias.
La directora general de Salud Pública del Principado, Lidia Clara Rodríguez, expuso que son muy parecidas a la BA.2, aunque "más leve y algo más contagiosa". Aún así, mandó un mensaje de tranquilidad después de los nuevos casos notificados por esta variante. "La inmensa mayoría de los casos son ómicron BA2. Los expertos no están diciendo todavía que es una séptima ola", argumentó.
En cuanto a las características de estas variantes, según un estudio publicado en 'bioRxiv', destaca su mayor capacidad para escapar de los anticuerpos generados por infecciones previas que han sido causadas por la Ómicron original. Por otra parte, crecen más rápido que la subvariante antecesora (BA.2) y que es, hasta el momento, la variante predominante. En el caso de BA.4, crece 0,08 puntos más, y hasta los 0,12 puntos diarios en el caso de BA.5.
Variantes con origen propio
Otro estudio realizado por el Instituto de Investigación de Salud de África, analizó muestras de sangre de pacientes infectados con la variante Ómicron original y muestras de pacientes que habían sido vacunados. En el primer caso, se descubrió un descenso de la producción de anticuerpos neutralizantes de ocho veces, mientras que con los pacientes vacunados contra la COVID-19, la caída de producción de estos anticuerpos fue tres veces menor.
Según el virólogo alemán Christian Drosten en su cuenta de Twitter, tanto la variante BA.4 como la BA.5 son variantes omicrónicas con origen propio. Es decir, ninguna de las dos son descendientes de las anteriores, sino que tienen su origen en el ancestro común omicrónico.
En Estados Unidos, los contagios han aumentado hasta un 50% en comparación a la semana pasada en diferentes Estados como Washington, Mississippi, Georgia, Maine, Hawaii, Dakota del Sour, Nevada y Montana. La cifra de ingresos hospitalarios también ha aumentado hasta un 10%, a diferencia de los datos registrados por las autoridades sanitarias norteamericanas la pasada semana.
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