viernes, 8 de agosto de 2025

GASTRONOMÍA 199 (Ni con el cartón ni fuera de la nevera: la mejor manera de conservar los huevos en casa)

 

Esta semana en GASTRONOMÍA vamos con un artículo muy interesante "Ni con el cartón ni fuera de la nevera: la mejor manera de conservar los huevos en casa". Consejos para saber donde tienes que conservar bien los huevos para que tengas seguridad y salud.



Ni con el cartón ni fuera de la nevera: la mejor manera de conservar los huevos en casa

 

 Ni con el cartón ni fuera de la nevera: la mejor manera de conservar los huevos en casa


La producción de huevos no cubre una demanda al alza
Pixabay

 

La acción más común al llevar de hacer la compra es meter los huevos en el frigorífico, a pesar de que en las estanterías de los supermercados estén a temperatura ambiente.

 

Los huevos no suelen faltar en ningún hogar de España. Son un alimento básico que se utiliza para todo tipo de elaboraciones: desde las clásicas tortillas de patatas hasta los postres más deliciosos. La duda que siempre surge cuando llegamos del supermercado es dónde se tienen que guardar. Quizás la acción que siempre se repite al volver de hacer la compra es meterlos en la nevera. Sin embargo, hay que recordar que en las estanterías de los establecimientos se encuentran almacenados a temperatura ambiente

 

¿Cuál es la mejor opción para conservar los huevos?

La solución a esta cuestión se relaciona con un delicado equilibrio entre la temperatura y las variaciones térmicas. En el proceso de comercialización, los huevos se mantienen a temperatura ambiente en el supermercado por una razón particular: prevenir cambios bruscos de temperatura.



La conservación de los huevos en los supermercados

 

El dilema de España con los huevos
 
 
El dilema de España con los huevos
 
Matthias Böckel / Pixabay
 

Desde la Organización Interprofesional del Huevo y sus Productos (Inprovo) han señalado a 20minutos que un cambio abrupto de temperatura, especialmente de frío a calor, puede causar la formación de condensación en la superficie de la cáscara. Esto, a su vez, podría facilitar la entrada de microorganismos en el interior del huevo a través de los poros.

 Por esta razón, se elige mantener los huevos a temperatura ambiente durante su almacenamiento y distribución, minimizando así los riesgos asociados con las fluctuaciones térmicas. No obstante, esta práctica se modifica cuando los huevos llegan a nuestros hogares.

Thank you for watching


La conservación de los huevos en casa

Se recomienda guardar los huevos en el frigorífico una vez que llegan a manos del consumidor. Al mantenerlos refrigerados, se prolonga su vida útil y se conservan todas sus propiedades. La refrigeración ayuda a preservar la frescura de los huevos durante más tiempo, asegurando su calidad hasta el momento de su consumo.

 

Hombre pone huevos frescos en la nevera.
 
 
Hombre pone huevos frescos en la nevera.
 
Cristina Villar Martin /iStockphoto
 

Además, para abordar específicamente el riesgo de condensación de humedad en la cáscara, se aconseja sacar del frigorífico solo la cantidad de huevos que se utilizarán en cada ocasión. Esto minimiza el tiempo que los huevos pasan a temperatura ambiente, reduciendo así la posibilidad de condensación y protegiendo la integridad del producto.

La clave está en encontrar el equilibrio adecuado entre la conservación durante el transporte y la prolongación de la vida útil en el hogar. Considerar estas pautas asegurará que disfrutemos de huevos frescos y seguros en nuestras preparaciones culinarias diarias.

 

Valor nutricional del huevo

Según la Fundación Española de la Nutrición (FEN), el huevo es un alimento de alto valor nutritivo, con un contenido energético moderado de 84 Kcal por unidad de tamaño medio. 

 

Nunca más te equivocarás con los tiempos.
 
 
Nunca más te equivocarás con los tiempos.
 
Freepik
 

Su proteína es de excelente calidad, destacándose por su alto valor biológico, aseguran. De hecho, la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) la utiliza como referencia debido a su equilibrada proporción de todos los aminoácidos esenciales. 

En la clara del huevo, encontramos proteínas como la ovoalbúmina (que representa el 54% de las proteínas de la clara), conalbúmina, ovomucina, y ovomucoide, entre otras. En la yema, están presentes proteínas de los gránulos como la lipovitelina, lipoproteínas LDL y fosfovitina, así como proteínas del plasma como la lipovitelinina y livetina.

En cuanto a las grasas, el huevo es rico en ácidos grasos monoinsaturados. Entre las vitaminas, se destacan la D y la A, además de varias del grupo B (B12, B2 o riboflavina, B3 o niacina y folatos). Entre los minerales, el huevo es una buena fuente de fósforo (gracias a su alto contenido en fosfolípidos), yodo y selenio. Además, contiene pigmentos importantes, como los carotenoides asociados a lipoproteínas y las xantofilas (zeaxantina y luteína), que poseen propiedades antioxidantes.


Nos vemos pronto dentro de 7 días con otra nueva entrada de GASTRONOMÍA.

 

 

TODA LA INFORMACIÓN LO HE

ENCONTRADO EN LA PÁGINA 

WEB DE 20 MINUTOS EN LA 

SECCIÓN DE GASTRONOMIA

 









   Pirata Oscar 

No hay comentarios:

Publicar un comentario