Esta semana en GASTRONOMÍA hablaremos de hacer buenas pizzas y que mejor que saber las Bases de pizza saludables y en la segunda parte seguimos con Qué pescados se deben congelar para evitar el anisakis.
La pizza es uno de los platos más populares y consumido en todo el mundo
La UNESCO la ha llegado a declarar Patrimonio Inmaterial de la Humanidad
En NIUS celebramos el Día Mundial de la Pizza con cinco recetas de bases de pizza saludables
¿Cuál es tu comida favorita? A esta típica pregunta seguro que muchos responden sin dudarlo: “la pizza”. Esta delicia de origen napolitano ha traspasado todas las fronteras y se ha convertido en la comida preferida de millones de personas de distintos países y culturas.
La devoción por la pizza es tal, que incluso tiene su propio día mundial el 9 de febrero y fue declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2017.
En NIUS ya te contamos cómo elaborar una masa de pizza casera de forma fácil, aunque debe consumirse con moderación porque se trata de una fuente importante de calorías.
Afortunadamente y para celebrar el Día Mundial de la Pizza, en NIUS te traemos cinco formas de seguir comiendo pizza sin temer por la línea o la salud.
1. Pizza de quinoa
Para elaborar esta pizza no necesitarás ninguna harina ni levadura: solo granos de quinoa cruda. Una preparación sorprendente para un resultado espectacular y saludable.
- Ingredientes para una pizza: 100 gramos de quinoa, 30 mililitros de agua, especies al gusto y sal.
- Paso a paso: limpia la quinoa y añádela a un bol con abundante agua. Déjala reposar un mínimo de tres horas. Desecha el agua, vuelve a limpiar la quinoa y agrégala en un procesador de alimentos o batidora junto a los 30 mililitros de agua, las especias y la sal. Bate hasta obtener una pasta uniforme. Coloca papel vegetal sobre la bandeja del horno y extiende la masa con la ayuda de una cuchara. Hornea la masa unos 8-10 minutos a 180 grados con calor arriba y abajo. Sácala del horno, decora con tus ingredientes preferidos y vuelve a hornear hasta que estén cocidos.
2. Pizza de brócoli o coliflor
Si te cuesta incorporar verduras en tu dieta diaria o en la de tus niños, con esta masa de pizza vais a comer brócoli o coliflor sin ni siquiera daros cuenta. También puedes animarte e ir variando con otras verduras como espinacas o zanahoria.
- Ingredientes: un huevo, 200 gramos de brócoli o de coliflor, 150 gramos de queso rallado, especias al gusto (sal, pimienta negra y orégano, por ejemplo).
- Paso a paso: tritura el brócoli o la coliflor con un robot de cocina o rállalo a mano. Mézclalo con el huevo batido, el queso rallado y las especias. Cubre la bandeja del horno con papel vegetal y vierte toda la masa encima. Aplástala hasta que quede una masa fina y con la particular forma redonda de la pizza. Hornea durante 15 minutos a 180 grados. Después, añade los ingredientes que quieras por encima y vuelve a hornear hasta que estén hechos.
3. Pizza de avena
Al reemplazar la harina convencional por avena, se consigue un aporte nutricional más completo y alto en fibra y una pizza apta para celíacos.
- Ingredientes: 300 g de avena molida, dos cucharaditas de levadura, 15 g de aceite de oliva, 200 g de agua tibia, sal y especias al gusto.
- Paso a paso: forma un volcán con la avena molida e introduce en el agujero el agua tibia mezclada con la levadura, el aceite, la sal y las especias. Enharina una superficie y trabaja la masa con las manos. Extiende la masa y sobre una bandeja de horno forrada con papel vegetal. Añade todos los ingredientes que quieras a tu pizza. Hornea durante 15 minutos a 180 grados.
4. Pizza proteica de huevo
Si quieres incorporar más proteínas a tu dieta sin renunciar al sabor, esta pizza es para ti.
- Ingredientes: 4 claras de huevo, sal y especies.
- Paso a paso: monta las claras a punto de nieve y añade la sal. Extiende la masa sobre una bandeja de horno forrada con papel vegetal y hornea durante unos 10 o 15 minutos a 185 grados. Añade tus ingredientes preferidos por encima y vuelve a hornear hasta que estén hechos.
5. Pizza de boniato
Si eres un amante del sabor dulzón del boniato, esta base de pizza te va a encantar. Además, es la más fácil de preparar de toda esta lista.
- Ingredientes: 150 g de boniato, aceite, sal y especias.
- Paso a paso: lamina el boniato en rodajas muy finas. Colócalas sobre una bandeja de horno forrada con papel vegetal de forma que queden superpuestas y dando una forma circular. Agrega un chorro de aceite, sal y especias al gusto y hornea durante 10 minutos a 180 grados. Ya tienes lista tu masa para ponerle los toppings que desees.
Qué pescados se deben congelar para evitar el anisakis
El anisakis puede provocar infecciones gastrointestinales y alergias
Según la OCU, el 36% del pescado que se consume en España lleva este parásito marino
Se recomienda congelar los productos durante al menos cinco días a una temperatura de -20 °C
El consumo de pescado está presente en la dieta variada de todos los españoles, siendo un alimento fundamental para mantener una vida saludable. Sin embargo, hay que conocer las recomendaciones oficiales para conservar correctamente el pescado y evitar la presencia del anisakis. Esta es una enfermedad causada por un parásito marino que infecta a muchos pescados que luego consumimos, provocando así, gastroenteritis, alergias y urticarias.
A pesar de que el anisakis se elimina con la cocción tradicional del pescado, ya sea frito, horneado o a la plancha, el problema está cuando el producto se consume crudo o poco hecho. Por este motivo, debes poner en práctica una serie de consejos para matar este parásito con un sistema de congelación adecuado, pero para ello debes saber qué pescados y cefalópodos suelen estar infectados.
En NIUS te vamos a traducir las pautas de la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN) para prevenir esta enfermedad.
Pescados que deben congelarse
Es imprescindible congelar estos alimentos antes de prepararlos y consumirlo, ya que pueden estar infectados de anisakis:
- Boquerones en vinagre y otros pescados en escabeche.
- Sashimi, sushi, carpaccios y otras especialidades a base de pescado crudo.
- Pescado marinado como el ceviche.
- Huevas de pescado crudas.
- Arenques y otros pescados crudos preparados en salmuera o ligeramente salados.
- Pescados marinos ahumados en frío.
No obstante, si estos alimentos los compras elaborados, el productor o fabricante está obligado por Ley a realizar la congelación previa.
¿Cómo congelar el pescado correctamente?
El pescado debe congelarse en casa a una temperatura de -20 grados o inferior durante un mínimo de cinco días en el caso de pescados pequeños o picados en rodajas, de lo contrario, deberás alargar el tiempo de congelación. Asimismo, siempre que congeles el pescado debes protegerlo con un papel film o bolsa de plástico para evitar que se estropee la textura por el frío.
Por otra parte, esta temperatura solo se alcanza en frigoríficos de tres estrellas, si no es tu caso, lo mejor es comprar el pescado ya congelado. Al estar ultracongelado a temperaturas más bajas de las usadas en un congelador doméstico y permanecer varios días desde que se elabora, hasta que se consume, el anisakis se elimina por completo.
Pescados que no es necesario congelar
- Las ostras, mejillones, almejas, coquinas y demás moluscos bivalvos.
- Los pescados de aguas continentales (ríos, lagos, pantanos…) y piscifactorías de agua dulce. Por ejemplo: truchas, carpas…
- Las semiconservas como las de anchoas (en envase metálico, de vidrio u otras presentaciones).
- Los pescados desecados salados de manera tradicional, como el bacalao o las mojamas.
¿Cómo prevenir el anisakis?
- Destripar el producto: si lo has comprado sin limpiar, debes quitarle las vísceras lo antes posible para evitar que el anisakis se desplace hacia el pescado o molusco.
- Destruye el parásito: la cocción del alimento y el congelado adecuado del producto lo elimina.
Nos vemos pronto dentro de 7 días con otra nueva entrada de GASTRONOMÍA.
TODA LA INFORMACION LO HE ENCONTRADO EN LA PÁGINA OFICIAL DE Nius
Pirata Oscar
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