Un router antiguo no es un trasto inútil: con unos simples ajustes puede convertirse en una herramienta útil en casa, ampliando funciones de la red y dando soporte a más dispositivos.
Si lo tienes tirado en un cajón pensando que ya no sirve porque ha cumplido su vida útil, estás desperdiciando un recurso valioso. A diferencia de otros dispositivos electrónicos , los routers antiguos todavía pueden rendir mucho si se aprovechan perfectamente.
Por ejemplo, con una configuración mínima, este equipo es capaz de convertirse en un extensor de señal, en un servidor para tus archivos o incluso en una red independiente que refuerce tu seguridad en casa.
Eso sí, conviene aclarar la diferencia entre un router y un módem , porque muchas veces se confunden. Por un lado, el módem conecta tu vivienda a internet, mientras que el router gestiona esa conexión y la reparte entre todos los dispositivos.
Los modelos actuales son más rápidos y traen funciones avanzadas, pero eso no significa que los anteriores hayan perdido todo su valor. Al contrario, puedes darles una segunda vida y sacarles más partido del que piensas.
- Ampliar la cobertura WiFi
- Convertirlo en un conmutador de red
- Crear una red de invitados
- Montar un servidor NAS casero
- Ofrecer compatibilidad a dispositivos antiguos
- Configurar una VPN
Ampliar la cobertura WiFi
Una de las formas más prácticas de recuperar un router viejo es configurarlo como repetidor. Si en tu casa hay habitaciones donde la señal no llega con fuerza o si los muros gruesos limitan la conexión, este método puede resolver el problema sin necesidad de invertir en dispositivos nuevos.
Solo tienes que enlazarlo con el router principal y dejar que distribuya la red en zonas donde antes no alcanzaba. Este simple ajuste te ayudará a no gastar de más.
En la práctica, esto supone que podrás ver series sin cortes en el salón más alejado, jugar online desde un dormitorio sin pérdidas de señal o trabajar con la misma estabilidad que en el resto de la casa. Un uso sencillo, pero que multiplica la cobertura con un aparato que ya tenías olvidado.
Convertirlo en un conmutador de red
Otro uso útil para un router antiguo es transformarlo en un conmutador. Con un simple cable Ethernet puedes conectarlo al router actual y obtener más puertos físicos para enchufar ordenadores de sobremesa, consolas, televisores inteligentes o reproductores multimedia.
Esto es especialmente útil en casas donde el WiFi no siempre es suficiente para garantizar estabilidad. Conectar por cable significa menor latencia, mayor velocidad y menos interrupciones. En lugar de comprar un switch de red, tu viejo router puede cubrir esa necesidad sin gastar un euro.
Crear una red de invitados

Imagen generada con IA
La seguridad también puede beneficiarse de un router que ya tenías olvidado en el trastero, por lo que configurarlo como red para invitados permite dar acceso a internet a tus visitas sin comprometer la red principal donde tienes conectados móviles, ordenadores o dispositivos de domótica.
Tener un WiFi separado evita que los invitados consuman ancho de banda de los equipos esenciales y protege la privacidad de tus archivos y dispositivos. Un detalle que parece menor, pero que en la práctica aporta orden y seguridad a tu hogar.
Montar un servidor NAS casero
Si tu viejo router dispone de un puerto USB basta con conectar un disco duro externo para transformarlo en un pequeño servidor NAS. De este modo, podrás guardar documentos, fotos o copias de seguridad accesibles desde cualquier dispositivo conectado a la red.
Es como tener tu propia nube en casa sin depender de servicios externos. Puedes cargar películas para verlas en tu televisor, guardar archivos de trabajo para acceder a ellos desde el portátil o usarlo como sistema de respaldo para el móvil.
Ofrecer compatibilidad a dispositivos antiguos

Generado con IA
Algunos equipos no se llevan bien con los routers modernos, especialmente impresoras de generaciones anteriores o portátiles con tarjetas de red antiguas. Un router viejo configurado como punto de acceso puede resolver ese conflicto y mantenerlos funcionando.
De esta manera, prolongas la vida útil de esos dispositivos y evitas tener que reemplazarlos antes de tiempo. Al final, es una forma de equilibrar lo nuevo con lo que aún funciona, aprovechando al máximo cada aparato en casa.
Configurar una VPN
Con un poco más de conocimiento, un router que ya no usas puede convertirse en tu puerta de entrada para configurar una red VPN. Esto significa que podrás navegar de manera más privada, con tu tráfico encriptado y protegido frente a terceros.
Existen firmware alternativos que permiten activar esta función en modelos compatibles. Una vez configurada, la VPN refuerza la seguridad de tu conexión, algo especialmente útil si manejas información sensible o trabajas en remoto desde casa.
¿Qué es WPS?
Cabe señalar que no todos los enrutadores sirven para todas estas funciones debido a que algunos vienen bloqueados de fábrica o necesitan actualizaciones de firmware antes de poder reutilizarlos. Conviene revisar qué modelo tienes y qué usos admite antes de invertir tiempo en configurarlo.
Si no estás familiarizado con los ajustes de red, lo recomendable es apoyarte en guías especializadas o tutoriales y, en algunos casos, puede ser preferible contar con ayuda para evitar errores. Aun así, la mayoría de las configuraciones básicas son accesibles con un poco de paciencia.
TODA LA INFORMACIÓN LO HE
ENCONTRADO EN LA PÁGINA
WEB OFICIAL DE COMPUTER HOY
Y VIDEO DEL CANAL OFICIAL
DE COMPUTER HOY EN YOUTUBE





 
No hay comentarios:
Publicar un comentario