'Weapons' y 'Una película de Minecraft'
Su funcionamiento interno ha sido la comidilla de la industria en los últimos años, pero lo cierto es que la división cinematográfica pasa por ser hoy la más boyante de Hollywood.
Hubo un tiempo en el que Warner solo era noticia por algún tipo de contratiempo o decisión cuestionable, sobre todo al hilo de su fusión con Discovery y el liderazgo de David Zaslav como CEO que esto supuso.
Desde entonces, al margen de los múltiples cambios de nombre en su servicio de streaming (ahora se llama nuevamente HBO Max, veremos cuánto dura) se ha llegado al extremo de cancelar películas que ya estaban rodadas, aunque entretanto ha ido brillando poco a poco la gestión de Michael De Luca y Pamela Abdy al frente de Warner Bros. Pictures.
Esto es, la división cinematográfica, que ha sabido alternar las propiedades intelectuales con los autores de vocación comercial. Algo arriesgado, pero que en 2025 le ha dado resultados admirables. Mientras que la recaudación global está encabezada por los más de 1.000 millones de dólares de Ne Zha 2 y Lilo y Stitch (distribuida por la competencia directa de Warner, Disney), según Deadline la major puede presumir ahora mismo de ser el estudio de Hollywood que más dinero lleva recaudado. Concretamente amasa ya 4.000 millones de dólares.
1785 millones en el ámbito doméstico, 2200 millones en el extranjero. Es la primera vez que lo logra desde 2019 (el año de Joker), con la particularidad de que aquí le han bastado 11 estrenos mientras que aquel año necesitó de 20. 11 películas que anticipan una gran apuesta por parte del estudio, habiendo estrenado Una batalla tras otra: película dirigida por un autor tan reputado como Paul Thomas Anderson que lidera Leonardo DiCaprio… y ha costado cerca de 160 millones de dólares.
Parece difícil que recupere la inversión, pero no hay que desdeñar el prestigio que supondrá haber desarrollado un film así (con críticas muy entusiastas que la sitúan como favorita al Oscar) y esperándose que termine el fin de semana con unos 45 millones globales.
Todo esto le brinda una imagen muy positiva de Warner, pues no solo ha conseguido esas cifras gracias a sagas conocidas como DC, Expediente Warren o Destino final, sino que además ha apostado por películas originales como la susodicha Una batalla tras otra, Los pecadores y la gran sensación terrorífica del verano, Weapons. New Line, por cierto, es el sello encargado del terror del estudio, y en ese sentido está de enhorabuena al haber encadenado en las últimas semanas Weapons con el estruendoso éxito de Expediente Warren: El último rito mientras meses antes no le había ido nada mal con Destino final: Lazos de sangre.
New Line ha batido un récord liderando la taquilla en cinco fines de semana consecutivos. Hablando de Warner en general, nos topamos también con siete películas consecutivas debutando con 40 millones (algo inédito para cualquier estudio) y siendo la primera compañía desde 2009 que logra que dos películas suyas superen esos 40 millones en un mismo fin de semana (cuando Los pecadores y Una película de Minecraft).
Warner acumula ahora mismo el 36% de la recaudación mundial y ha sido el estudio más taquillero en abril, julio y agosto. La gestión de De Luca y Abdy se marca un gran tanto por contraste a las prácticas de sus jefes, y ahora mismo Warner Bros. es el estudio histórico de Hollywood con una mayor salud creativa y económica… aunque Disney espera dar un golpe sobre la mesa en las próximas semanas con los lanzamientos de TRON: Ares, Zootrópolis 2 y, especialmente, Avatar: Fuego y ceniza.
El ránking de mayores estrenos de Warner es el que sigue: Una película de Minecraft ganó 957 millones, F1: La película hizo 624, Expediente Warren: El último rito lleva 403, le sigue Los pecadores con 366, ahí viene Destino final: Lazos de sangre con 313, y por último está Weapons con 263. Mickey 17 hizo 133 a continuación, pero distó de ser un éxito teniendo en cuenta lo mucho que costó.
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